viernes, agosto 8

De vuelta, de nuevo

Realizados los debidos viajes veraniegos, me encuentro entre dos continentes, dos países y diversas lenguas: el inglés hablado en casa de mis padres, con buen acento coreano, el italiano de mi marido, el francés québécois que está aprendiendo mi hermana y el español libresco que me sirve para mis fines académicos, y que ahora leo, escribo y hablo peor que antes y con cada vez más influencia italiana en mi acento y mi léxico.

Esta vez, sin embargo, vuelvo enriquecida por la clausura de un círculo verdaderamente vicioso que nos consumó a todos durante ocho años -- un drama familiar que se ha resuelto por fin en modo agridulce -- y que me ha pesado en modo particular, como suele suceder a los que asumen el papel de intermediarios y negociantes de la paz en cualquier familia.

Aparentamos filosóficos y tranquilos los que se encargan de este papel, pero debajo de la superficie yace un sistema complejo de nudos contradictorios y señales perdidas. Es que cuesta hablar en algunas situaciones y en otras puede resultar fatal. Hay que hablar, hay que comunicar; al mismo tiempo, hay que escuchar y hay que reflexionar.

¿Qué tiene que ver todo esto con la cocina? Mucho: pues, la cocina es donde reflexiono, donde recuerdo cosas, donde mido la harina y verifico que haya todos los ingredientes necesarios...es un laboratorio donde se curan las cicatrices, se cuida la piel y se organiza nuestra alimentación. Aquí, no hay idioma, no hay confusión, sólo aceite de oliva y el perejil que crece en nuestro jardín.

Bienvenidos de vuelta, de nuevo.

viernes, abril 11

Cena primaveril con salmón ahumado

Lamento mucho el no haber podido sacar fotos de esta cena. Es que fue muy divertido hacerla, había muchos colores, muchos ingredientes sencillos y frescos juntos al salmón ahumado, con su textura y sabor, que se combinaban bien con todo.

1. salmón ahumado: sacar el salmón de su envoltorio y disponerlo sobre un plato.

2. califlor al vapor: aplastado y aderezado con sal, mantequilla y muy poco vinagre balsámico blanco.

3. ensalada de espinacas: con hinojo cortado muy finamente, tomates de uva, sal, vinagre balsámico (normal), aceite.

4. huevos cocidos: hasta que sean duros, luego cortados por la mitad y aderezados con sal, aceite y vinagre balsámico blanco.

Servirse un poco de todo y disfrutar de la mezcla de los ingredientes. Cada uno tiene sus preferencias.

¡Buen provecho!

lunes, abril 7

Champiñones y piñones

Esta receta viene de un libro de recetas de tapas, y creo que con el tiempo se va transformando en otra cosa, porque no soy literal con las recetas. Pero aquí va la idea de la receta, más o menos:

Ingredientes:
1 cebolla pequeña, picada
1 diente de ajo (optativo)
champiñones limpios, cortados
piñones
aceite de oliva
sal
mantequilla (poca)
vinagre de vino blanco (variante: porto)
perejil picado (variante: albahaca seca)

Preparación:
1. calentar en una sarten una cucharada de aceite de olive virgen extra.
2. rehogar la cebolla, junto con el ajo (yo lo uso entero, para que dé sabor a la comida sin ser demasiado pesado).
3. agregar los champiñones cortados y saltear durante 1 minuto, luego agregar un manojo de piñones.
4. reducir el fuego y ajustar de sal, sazonar con mantequilla, luego un poco de vinagre y decorarlo todo con el perejil picado.

Servir con pan como tapa o con pasta como plato principal.

sábado, marzo 22

Una cena rica y sencilla

Anoche cenamos mucho más tarde que de costumbre (que para nosotros sería entre las siete y las nueve de la tarde). Era tan tarde que si hubiéramos salido a comer, habríamos cenado casi a las once. Entonces apenas llegué a casa, me puse a trabajar y no sé si fue por la hambre, la satisfacción de hacer las cosas yo misma, de ser autora de mi propia cena en casa, o simplemente por el cansancio que nos quitaba el juicio....será un poco de todo, pero debo decir que anoche valió la pena esforzarnos a pesar de nuestra hambre.

La cena consistió en una ensalada de rúcula con una zanahoria cortada muy fina, arroz basmati recalentado con lentejas rojas, salmón con salsa oriental (por así llamarla) y puré de pastinaca.

Para la ensalada:
Se necesita un manojo (o dos) de hojas de rúcula, una zanahoria cortada en tiritas finas, sal, vinagre balsámico, un chorro de miel y mucho aceite de oliva.

Para el arroz basmati con lentejas rojas:
Siempre preparo este tipo de arroz con las lentejas rojas. Lavo el arroz y las lentejas, luego lo pongo a cocer con el doble de agua, una buena cantidad de sal y algo de aceite o mantequilla. Se puede perfumar con una hoja de laurel también.

Para el salmón:
Teníamos dos trocitos con la piel. Lo freí en una sartén con un poco de aceite de oliva.

Para la salsa:
Calenté a fuego lento la siguiente mezcla: una cucharadita de mermelada de naranja con dos cucharaditas de salsa de soja, casi una cucharadita de almidón de maíz, un diente de ajo, dos trocitos de jengibre que equivalían en tamaño dos dientes de ajo, media taza de agua.

Para el puré de pastinaca:
Lavé y corté en tres, cuatro partes dos pastinacas y los eché al agua hirviendo, que había salado como para hacer la pasta. Las dejé hervir por un rato, hasta que se deshacían cuando intentaba pincharlas con un tenedor. Cuando estaban bien cocidas, escurrí el agua, luego las aplasté con una cuchara y agregué lo que equivaldría una cuchara de mantequilla y una taza de leche de soja.

Al momento de comer: coloqué el arroz por un lado del plato hasta cubrir casi la mitad de ésto, luego dos cucharas del puré de pastinaca al lado, el salmón por el otro lado, vertiéndole encima la salsa oriental y al final, coloqué entre el arroz y el salmón una porción pequeña de ensalada.

Tiempo de preparación: 30 minutos.

miércoles, marzo 5

Resolución tardía

Me di cuenta de que llevo tanto tiempo investigando opciones para las sobrinas italianas y amigas italófilas de sobrinas italianas(en realidad una amiga de una sobrina), que he perdido de vista mis propios sueños, que poco a poco estoy recuperando a través de este blog; es decir, realizar un viaje de más de un mes en un país de habla hispana. Las largas estancias en Italia no me molestan para nada, pero cada año me llevan más cerca y más lejos de un sueño que nació del capricho de mi padre al ponerme un nombre hispano. Y en cierto sentido, la globalización nos permite explorar mundos ajenos, de modo que podemos dejarnos llevar por las características culturales que más encanto tienen para nuestras sensibilidades.

Mi marido declara perplejo que nunca me ha oído hablar coreano, y es que para mí se ha convertido en lenguaje secreto de mi pasado. En otros tiempos, quizás no habría habido ocasión para esta fragmentación lingüística y cultural--por ejemplo, si mis padres se hubieran quedado en Corea y si yo hubiera crecido allí. Pero de alguna parte he heredado esta curiosidad cultural y el deseo de conocer otros mundos.

Quizás a medida que lo innato vaya desfamiliarizándose, se hará de nuevo objeto de mi curiosidad. En tanto, estoy decidida a enseñar a la futura generación todo lo que conozco de mi lengua madre, aún cuando las lenguas que se oirán con más frecuencia en nuestra casa serán el español, el italiano y, obviamente, el inglés.

Pero basta ya de hablar. ¡Todos a comer, que ya es la hora del almuerzo!

viernes, febrero 29

Berenjena.....

Hoy me he dado por leer sobre la berenjena: en esta página se habla del valor nutritivo de esta hortaliza.

Últimamente la preparo con cebolla picada y salsa de tomate, en la sartén, con un diente de ajo y cubro todo con la tapa y dejo que cueza a fuego lento durante media hora. Entonces el pulpo de la berenjena empieza a deshacerse y con el cucharón lo aplasto suavemente, y agrego una cantidad generosa de miel. Está muy rica esta preparación con un poco de pan casero.

Como estoy de humor para enlazar todo, aquí va otro enlace con varias recetas de berenjenas:

Mil y una maneras de preparar las berenjenas.

miércoles, febrero 27

Sopa de albóndigas

Encontré la receta aquí hace casi dos años, pero nunca tuve ocasión de prepararla hasta el diciembre pasado, cuando vino a visitarnos nuestro mejor amigo. La foto representa bien el resultado y debo decir que el arroz le concede una textura casi cremosa a las albóndigas. Vale la pena probar la receta; y, para variar, yo la seguí al pie de la letra y salió sabrosa. Bueno, aquí va mi versión críptica:

Ingredientes:

-para la sopa-
30ml aceite de oliva
1 cebolla picada
1 diente de ajo
120ml salsa de tomate (passata di pomodoro)
3l caldo de pollo o agua o caldo de carne
2 zanahorias grandes, cortadas en rodajas
225g judías verdes, lavadas y despuntadas
340g guisantes congelados
orégano seco
sal y pimienta
100g cilantro fresco

-para las albóndigas-
450g carne de res molida
80g arroz sin cocer (o 100g arroz cocido)
1 huevo
100g hierba buena fresca y/o perejil fresco
8cc sal
una pizca de pimienta


Preparación:

1. Rehogar la cebolla y el ajo en el aceite de oliva. Agregar la salsa de tomate y el caldo; llevar la mezcla a ebullición, luego bajar el fuego y dejar que cuece unos minutos. Luego añadir las zanahorias y las judías verdes.

2. Mezclar el arroz con la carne, agregando al mismo tiempo la hierba buena y/o el perejil, la sal y la pimienta. Echarle al conjunto el huevo crudo y mezclarlo todo bien. Formar las albóndigas y añadirlas al caldo, que se estará cociendo a fuego moderado. Tapar y dejar cocer durante media hora.

3. En los últimos minutos de la cocción, agregar los guisantes, una pizca de orégano seco y ajustar de sal y pimienta.

4. Al servir la sopa, decorar los platos con unas hojas de cilantro fresco (cosa que no hice y no creo que hiciera falta tampoco).

sábado, febrero 23

Hablando de comida...

Lo de la dieta vegetariana de nuestra huésped adolescente se ha resuelto, o se resolverá de la siguiente manera:
1. No es tan fanática como temía, aunque lo de cocinar aparte su comida me sonaba así, pero bien.
2. Que tratará de mantener su vegetarianismo, pero como vea tanta carne y le apetezca comerla, tampoco la rehusará rotundamente si esto significa que no podrá comer nada más y sobre todo si le apetece (y en casa de mis cuñadas, estoy segura de que sí).

Entonces ¿por qué me preocupaba tanto por la tendencia vegetariana de nuestra amiga jovencita? Porque yo, creciendo en una familia monocultural, cuando llegué a la edad de esta chica, me di cuenta de que la carne de res--tan fundamental en la comida coreana-- no me hacía bien, que lo que realmente me gustaba era el modo en que se aliñaba. Entonces sí que tomo en serio las preferencias y las limitaciones alimenticias de mis huéspedes adolescentes, con el objetivo de mejorar poco a poco los hábitos alimenticios y siempre con miras a la salud de estas jóvenes.

Pero cambiando de tema (y a propósito de los hábitos alimenticios), creo que cuando era niña, mi madre me hizo un gran favor al ahorrarse las explicaciones e ir al grano con el cuento de las papas fritas: -M'hija, no comas tantas papas fritas, que morirás jovencita, lo cual abrevié a mi manera deciéndole a la señora que me cuidaba que no quería papas fritas porque no quería morir.

[Este post habla del amor de los coreanos a la comida.]

jueves, febrero 21

Sopa de cebada con champiñones


Ingredientes:

cebada perla
1/2 cebolla picada
300g champiñones cortados
consomé
1 copa de vino tinto
1 cucharada de mantequilla
aceite de oliva

Preparación:


En una olla grande, rehogar la cebolla en un poco de aceite de oliva precalentado. Añadir los champiñones y luego un puñado de cebada perla. Ya que se me había olvidado de agregar la mantequilla antes, lo hice a este punto. Agregar 1 litro de consomé, mezclado con agua y llevar a ebullición.

Dejar que cuece durante unos 15 minutos, luego agregar la copita de vino tinto.

Ajustar de sal.

Para una estupenda receta que contiene cebada, les recomiendo la lectura de este post.

martes, febrero 19

Cuando viajan los jóvenes vegetarianos

Este verano viajaremos a Italia por casi un mes y medio con una adolescente vegetariana que se convirtió a ese dogma cuando se educó a base de la información que publica PETA. Ya que el viaje implica un intercambio cultural y nosotros no la hospedaremos sino que lo harán nuestros cuñados, me estoy obsesionando por el tema de la alimentación de esta chica.

Lo del vegetarianismo no me importa, porque mi marido y yo somos felices como unas lombrices al comer platos sin carne, a veces excluimos los productos lácteos, a veces no....En fin, nuestra dieta incluye elementos vegetarianos y veganos, pero no somos vegetarianos "por dogma" (que in inglés produce un gracioso juego de palabras).

Me parece poco delicado plantearse una postura rigurosa y estricta en cuanto a la dieta cuando uno está en casa ajena, sobre todo porque no habrá quien le cocine su porción de comida vegetariana, no habrán los productos a base de soya como se encuentran con tanta facilidad aquí. En mi experiencia, los vegetarianos son menospreciados en sus viajes, sobre todo a la hora de comer. He visto a camereros que traían platos de espaguétis con salsa de carne a los vegetarianos, luego quitaban la carne y servían el mismo plato, como si esto bastara para convertirlo en plato vegetariano! Y no los critico, sino que entiendo perfectamente ambos lados de la situación.

Creo que la dedicación de nuestra amiga adolescente se debe más a los esfuerzos de su madre, que se quiebra el cerebro para preparar y conseguir comida para su hija. Además, nuestra amiga, aunque es la única vegetariana en su casa, ahora pretende que su madre no prepare su comida en la misma sartén en la que se prepara la comida del resto de la familia.

Veamos lo que pase, que ¡preveo un choque cultural a nivel gastronómico!

Mi pregunta a Uds. es: ¿Qué estrategias recomiendan a los jóvenes vegetarianos que se encuentran en otra cultura, lejos de sus casas? En particular, ¿qué sucedería si una huésped llegara a su casa y dijera que no come carne ni nada que contenga productos animales? ¿Les complicaría mucho la vida?

miércoles, febrero 13

¡Fiesta!

Hace un par de semanas me reuní con una amiga, que mencionó que quería hacer una fiesta para su cumpleaños, pero que su casa era demasiado pequeña y a lo mejor podía invitar a sus amigos a un restaurante, a lo que le dije que podríamos hacer la fiesta en nuestra casa, porque tenemos espacio y además llevamos demasiado tiempo sin hacer fiestas ni nada. Además, queríamos invitar a las mismas personas, así que ¡ya tenemos planeada la fiesta para este viernes!

Entonces.....aquí van las recetas que yo prepararé. No veo la hora de desenchufarme del computador y perderme por unas horas en la cocina.

1. Trufas veganas (sin mantequilla ni leche)
-3/4 taza de anacardos (semillas de marañón)
-3/4 taza de agua fría
-1 libra de chocolate amargo
-cacao en polvo

Según la receta, hay que licuar los anacardos y el agua durante 1 o 2 minutos, mezclar y luego repetir la operación hasta obtener una textura parecida a la de la nata.
Al mismo tiempo, hay que calentar el chocolate en baño maría hasta que se derrite, luego se deja enfriar y se incorpora poco a poco a la crema de anacardo, evitando que se formen burbujas.
Se deja enfriarse el conjunto en la nevera durante 2 horas.
Se forman las bolitas pequeñas, que luego serán cubiertas de cacao en polvo y que serán colocadas en seguida en una bandeja en la nevera.



2. Empanaditas asiáticas

Las haré menos en honor al nuevo año chino que por la simple razón que me encantan las empanaditas asiáticas, igual que la pasta complicada--los tortelloni, por ejemplo--y todo lo que sea bueno, sale mil veces mejor en una empanadita de éstas.

Haremos mil experimentos. Últimamente las hago con puerro cortado en rodajas y aliñado con sal, aceite de oliva y muy poca salsa de soja. Este viernes, las quiero hacer con los siguientes rellenos: las clásicas de porro, puré de patatas, patata dulce, cebolla y berza, carne tritada y perejil....como se ve, esta vez se hará una versión fusion de las empanaditas.



3. Crema de garbanzos (Hummus)

Prometí hacer además una receta auténtica de hummus, usando un ingrediente secreto que sé que casi nadie lo podría adivinar. Como siempre lo hago de modo instintivo, es probable que yo misma no siga bien cada paso de la receta:

una lata de garbanzos
1 o 2 cucharadas de tahini (pasta de sésamo)
2-3 dientes de ajo pelados y machados
agua, limón, sal, aceite de oliva
azúcar

1. escurrir el líquido de los garbanzos.
2. colocar el tahini en la licuadora, junto con media taza de agua y el ajo; procesar por un minuto y agregar una cucharada de azúcar (cuanto menos refinado, mejor); agregar más agua si es necesario y procesar unos 30 segundos más.
3. agregar los garbanzos, y salar; procesar de nuevo.
4. el toque final: ir vertiendo a chorro fino el aceite de oliva por el hueco de la tapa mientras se procesa a una velocidad más lenta.

En algún momento habría que agregar el jugo de medio limón, pero es que no me acuerdo ahora cuándo. ¡Ya recordaré después de la fiesta!

El mejor modo para servir el hummus es en un plato y verter encima una capa de aceite de oliva y decorar la superficie con algo rojo (el pimentón o los tomates picados) y algo verde, como el perejil picado.

4. Hummus, versión mangorosa:

En vez de garbanzos, se usan las espinacas remojadas con un diente de ajo y se agrega un poquitín de salsa de soja.

Mientras tanto, seguiré enchufada al computador, haciendo mis tareas y soñando con mi cocina tan añorada.

¡Que tengan una buenísima semana!

viernes, febrero 1

Tareas domésticas



Estamos en pleno medio de nuestro año nupcial: para precisar, comenzamos con una breve pero elegante ceremonia aquí donde vivimos, a la cual vinieron parientes desde Italia y Canadá, además de un amigo muy querido aquí en EEUU.

Meses después de casarnos, aquí estoy, armando las bomboniere para la recepción que están organizando en Canadá mis padres, para los que nos dieron regalos, aunque no vinieron a la primera ceremonia, ni podrán asistir a aquélla que haremos en Italia en julio.

Es que la fuerza del tiempo, de las tradiciones y de las diferencias culturales entre mis padres y yo han creado un caos global de proporción universal, con implicaciones existenciales: ¿qué es la familia, al fin y al cabo? ¿por qué luchar en contra de las tradiciones cuando éstas forman parte de una economía sociocultural, en la cual han participado nuestras familias? ¿cómo pretender que dos personas puedan cambiar o escapar a toda esa red complicadísima de gestos correspondidos a lo largo de décadas?

Por otro lado, ahora tenemos un pretexto para conversar y negociar, tenemos que planear con meses de anticipación, llegamos a un acuerdo, tomamos decisiones, y aprendemos todos a navegar espacios desconocidos; mis padres descubren que, no todos los matrimonios son iguales, mi esposo está descubriendo que sí que son necesarios e incluso bellos estos eventos y yo estoy descubriendo que las bodas en realidad son un mecanismo de negociación y trabajo en equipo que prepara a ambas familias, junto a la pareja, a realizar otros planes y otras cosas más importantes en el futuro.

Desde fuera, habíamos visto sólo los aspectos superficiales, y al querer huir de éstos, casi nos perdimos esta maravillosa oportunidad para crecer y dejar florecer las expectativas de nuestros parientes.

Es con esta visión que me empeño en preparar con diligencia y no poca reflexión mis bomboniere de la seconda ronda.

domingo, enero 27

Patatas al horno con romero

Aquí va una receta de fácil preparación, si no les importa pelar media docena de patatas, cosa que logro hacer sólo distrayéndome, hablando por teléfono o escuchando noticias sobre el status actual del mercado internacional...

Ingredientes:
5-6 patatas de tamaño mediano
aceite de oliva
1 diente de ajo machacado (más si se quiere)
sal
limón o vinagre o vino blanco
una pizca de romero

Preparación:
1. Pelar las patatas y cortarlas en dados
2. Colocarlas en una fuente y verter sobre ellas media taza de aceite. Salar y agregar el ajo machacado y el jugo de medio limón o de un limón entero (depende del tamaño del limón, del jugo que se exprime...en fin, del gusto individual), o bien a falta de ésto, vino blanco o un vinagre de vino blanco.
3. Mezclar con todo un poco de romero (fresco o seco, es casi igual en mi opinión; aunque por cierto nunca lo diría de la albahaca, que para preparar el pesto en casa, no se me ocurriría nunca usar albahaca seca)
4. Cocinar al horno a la temperatura que se usa en casa (cada horno es diferente) para este tipo de preparación...
5. Servir las patatas con un buen estofado de lentejas, con carnes, sobre todo albóndigas (la receta original es griega, y se servía con albóndigas al horno...)

Buen provecho!

jueves, enero 24

Un plato multifaceta

Ragù con pasta all'uovo (salsa de tomate con carne y pasta al huevo)

En un principio, el plato comenzó así: pasta al huevo con salsa de tomate, pero yo lo hago al revés, es decir, preparo la salsa y luego le echo la pasta. Durante la semana, hago pequeñas modificaciones cada vez que caliento las sobras.

Ingredientes:
1/2 cebolla picada
1 lata de tomates
250g carne molida
1 zanahoria troceada
450g champiñones, cortados en láminas gruesas
pasta al huevo (según el propio gusto)

Preparación:
1. En un poco de aceite de oliva, remojé la cebolla y luego añadí la zanahoria picada y los champiñones cortados. A veces cocino primero la carne con la cebolla, a veces se le echo después de los demás ingredientes.
2. Luego le eché la carne a lo que había en la sartén y la doré durante un par de minutos.
3. Bajé la temperatura y añadí los tomates (enlatados, pero se pueden usar tomates frescos troceados)
4. Le eché una pizca de albahaca seca y ciboulette. Ajusté de sal también.
5. Al final, agregué la pasta y le eché algo de agua al conjunto. Puse la tapa y dejé que se cociera la pasta durante 10 minutos a fuego medio bajo.

Preparé alrededor de 4-5 porciones, que he ido calentando durante la semana. Aquí van las variantes (porque comer el mismo plato todos los días cansa):

Variante A: agregar un poco de agua y ajustar de sal. Calentar en una olla pequeña o en el micro-ondas.

Variante B: agregar una cucharada de yogúr

Variante C: (cuando llegamos al final de la semana y ya no soportamos ni el olor de este plato sustancioso) hacer una sopa, agregando o agua o consomé.

¡Buen provecho y buen fin de semana!

sábado, enero 19

Gracias, Soraya!

Soraya me ha honrado con un premio, pero uno que trae condiciones: responder al cuestionario y elegir cinco blogs.

LO QUE TE CHOCA: La falta de respeto en cualquier ambiente y el cinismo extremo (un poco nos hace bien).
LO QUE TE ERIZA: La arrogancia y una actitud patológicamente negativa y egoïsta.
LO QUE TE EXCITA: Las nuevas experiencias, las nuevas recetas, aprender algo nuevo cada día.
LO QUE TE SUELTA: Leer o escribir poesías y estar concentrada en ello.
LO QUE TE HACE REÍR: La espontaneidad en las ideas, en el arte, en la moda
LO QUE TE HACE LLORAR: La alegría (sé que no tiene sentido, pero soy así)
LO QUE TE DA NAUSEAS: Algunas noticias que leo en el periódico (además del apio, el exceso en el comer y beber y la deshidratación...)
LO QUE TE FALTA PARA SER FELIZ: ¡Otra receta más!
LO QUE TE TRAE INFELICIDAD: La envidia entre amigas y la falta de solidaridad entre colegas.
LO QUE TE LASTIMA: La invasión de mi espacio personal, que podría corresponder también a una falta de respeto en el fondo.
LO QUE DESEAS: La paz para todos que, o por razones culturales o por motivos personales, no pueden aceptar la felicidad de los demás
LO QUE TEMES: Perder interés en cosas creativas, porque "ya somos grandes"...
LO QUE NO QUIERES PERDER: La creatividad y la curiosidad.
LO QUE QUIERES ALCANZAR: La vejez al lado de mi marido y la paz interior.
LA FECHA QUE ODIAS: Todas las fechas en que hay campañas pesadas de publicidad por incentivar el consumismo, que convierten en circo materialista los momentos más bellos de nuestras vidas.
UNA FESTIVIDAD QUE ADORAS: Cualquier momento en que reciba sorpresas.
UNA MENTIRA QUE HAYAS DICHO: Toda frase que comience con "Es que....": y no es que sea mentira, sino que mi mala memoria va cambiando la razón por la que empecé la frase con esa expresión.
UNA NOSTALGIA: La primera vez que leí a Julio Cortázar.

Entonces, elijo los siguientes blogs:

El blog de María Elena: http://como_una_centila.ilcannocchiale.it
El blog de Serena: http://sbloggata.ilcannocchiale.it (en italiano)
El blog de Ombra: http://ombra.ilcannocchiale.it (en italiano)
El blog de encantadísimo: http://www.encantadisimo.com
El otro blog de Soraya: http://isosu.blogspot.com/

viernes, enero 18

Recetas medio cocidas

En mi viejo blog, cuando no me daba tiempo escribir recetas enteras, o cuando se me olvidaba apuntarlas y quería recordarlas después, entonces escribía listas de recetas, poniendo algunos de los ingredientes claves. Así haré hoy, que tengo más inspiración que tiempo y más hambre que palabras:

1. Patatas al horno con romero, ajo, sal y aceite de oliva extra virgen. Una delicia.

2. Estofado de lentejas con tantas cosas que no me acuerdo.

3. Sopa cremosa de patatas y porros (pero con leche de soja).

4. Pescado con salsa verde (orégano, perejil, alcaparras y limón).

Bueno, hasta pronto y ¡buen provecho a todos!