Saliendo de la biblioteca, con la testa llena de poesía y música, música y poesía, lo poético-musical, y --para variar-- lo músico-poético, pensé otra vez en mi sueño de la otra noche....
Waldstein, en do mayor.
El teclado del computador....
Waldstein, en do mayor y la primera nota que fallé ha sido una de las teclas negras...
El teclado del computador....
Dos pasitos más y entendí la razón por el error que sigo haciendo en mi sueño: el teclado de mi computador no tiene teclas negras.
Entonces, sí, Sogni, voy bien con la tesis. Al menos los sueños me lo indican así.
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