Ha habido una larga interrupción debido a las vacaciones, un período intenso de escritura, cenas (y escenas) inéditas, redacción de lo escrito, etc. En fin, mucha comida y mucho cuento y aquí van algunas de las recetas que nos han salido bien:
Chorizo o salchicha Andouille con miel y brandy, en salsa de tomate
Pescado de agua dulce con pan rallado e hierbas
Espinacas cocinadas
(para 4)
Para la salsa:
2 chorizos o salchichas Andouille, cortados en rebanadas
300 ml salsa de tomate, licuada
50 ml de miel, 30 ml de brandy
1 puerro, lavado y cortado en rodajas
Pimienta blanca, negra
Paprika, pimentón picante
Calentamos un chorrito de aceite de oliva en una cazuela y doramos el chorizo y cuando esté dorado, le echamos el brandy y el miel. Luego le echamos el puerro y lo sudamos a fuego lento (para que no pierda demasiado líquido el chorizo); cuando el puerro comienza a ablandarse, le agregamos la salsa licuada de tomate. Sazonamos con las especias y dejamos cocer por media hora a fuego suave con la cazuela tapada. Apagamos el fuego y dejamos enfriar la salsa.
Para el pescado:
pescado de agua dulce, salado y aliñado con jugo de limón y aceite de oliva
1 cucharada de alcaparras, picadas (pero no demasiado finamente)
2 filetes de anchoa, molidos
50 gr de pan rallado
timo fresco, salvia fresca
aceite de oliva
El pescado se prepara un día antes, o al menos algunas horas antes de la cena. Lo dejamos ya salado y aliñado, en un recipiente para hornear, en el frigorífico y preparamos lo que cubrirá el pescado en el horno. En un tazón, unimos el pan rallado, las alcaparras picadas, las anchoas molidas y las hierbas. Se puede agregar un poquito de sal, si se prefiere (para contraarrestar la insipidez del pescado de agua dulce). Saquemos el pescado del frigorífico y lo cubrimos, ayundándonos de una cuchara, con una capa fina de la mezcla de pan rallado. Le echamos un chorro de aceite de oliva y lo transferimos al forno precalentado a 190 grados por 10 minutos.
Para las espinacas:
un montón de espinacas frescas (siempre parece que son tantas antes de cocinarse)
un diente de ajo pelado y cortado en dos, o en rodajitas, si se prefiere
aceite de oliva
Cocinamos las espinacas en agua ligeramente salada por pocos minutos, luego las colamos y las pasamos a la sartén con el ajo y un poco de aceite de oliva. Las colocamos en un fuente para servir.
Para servir:
Colocamos una porción de pescado en un plato y le echamos una cucharada de la salsa roja de chorizo (recalentada, si ha enfriado mucho). A su lado, cada uno se sirve la cantidad de espinacas que desee.
Para beber:
La garnacha.